Tenías nombre propio, amor... Tenías una sonrisa de esas que no se saben poner así como así. Tenías un olor que se restregaba con el viento, y se pegaba en mi ropa los viernes, a las nueve y treinta y tres de la mañana. Te fumaba, amor, te fumaba en ocho caladas y te apagaba en mi cuerpo, jodiéndome a quemaduras, y por eso ahora estoy marcada de cicatrices que sólo hablan de ti.
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Se va todo menos la soledad. 23.1.12
Me he acostumbrado demasiado pronto a ti,sabía de sobra que las personas no duran para siempre,sin embargo creí en ti hasta la última bocanada de aíre,te dí millones de oportunidades y las rechazastes todas.No voy a engañar a nadie,te añoro,es una sensación un tanto rara,es como si sientes que se falta algo,algo como el oxígeno para respirar y el agua para sobrevivir.Quieres retroceder para borrar del pasado todo lo que hizo que nuestros caminos se bifurcaran,la peor sensación que hay es estar viva y sentir como lentamente dejas de respirar,te mueres,te mueres ahogada en millones de recuerdos que jamás saldrán de tu cabeza.El orgullo no gana al corazón.